Desgobierno y Corrupción


                                                               DEGRADACIÓN  

 

Conviene recordar nuestra historia reciente, pues ha entrado en un olvido, que resulta preocupante y que nos está llevando a cometer errores muy graves que afectan a todos los ciudadanos, sin importar cuales pueden ser sus ideas políticas.

 

Los que ya hemos cumplido más de 65 años, hemos vivido en una Dictadura donde los ciudadanos se casaban entre los 21 y 24 años de edad y se compraban una vivienda con hipoteca a pagar en 10 años.

 

No como ahora que te cuesta pagarla 40 años, cuando no te desahucian por no poder pagar. Lo hacía la mayoría con un sueldo sólo (ahora muchos no pueden ni con dos sueldos).

 

A los 18 años nos sacábamos el carnet de conducir y muchos nos pudimos comprar nuestro primer coche a los 19 años.

 

Comenzamos a comprar nuestro primer piso o hacernos la primera vivienda (con un solo sueldo).

 

Vivimos una infancia maravillosa, una juventud excelente, todo ello en esa Dictadura tan mala. Jamás vimos 23 Ministerios, ni 18 Gobiernos.

 

Viajamos por toda España, en toda ella ondeaba una sola bandera, la de España, se hablaba un idioma, el español, (y se aceptaban tanto el Eusquera como el Catalán si menospreciar el español), los ciudadanos teníamos los mismos derechos y obligaciones en todo nuestro territorio, había un enorme respeto a las fuerzas de seguridad, a la familia. Ésta se componía de marido, mujer e hijos.

 

Se nos educaba en valores. En cualquier medio de transporte se cedían los asientos a mayores, embarazadas y personas que se viera la necesidad de ese asiento. Había respeto y educación. Las drogas (aunque algún caso hubiera) sólo las conocíamos en las películas. A nuestros mayores los atendimos mayoritariamente en nuestras casas.

 

España, en tiempos de esa Dictadura, se posicionó como la octava potencia del mundo, la cuarta en construcción de grandes buques. Prácticamente no pagábamos apenas impuestos, el IRPF no existía, El IVA no se pagaba, la declaración de la renta no existía. Donde solo había 700.000 funcionarios capaces de gestionar y gobernar el país.

 

Se construyeron 4.500.000 viviendas para los españoles. Se hicieron cientos de pantanos, se podía salir a eventos y volver a casa a las tres de la madrugada y nadie nos asaltaba.

 

Los vecinos eran la familia más cercana que teníamos todos y nos ayudábamos. Y, por supuesto, ningún okupa nos quitaba nuestra casa.

 

Ahora dicen que vivimos en una democracia y que según los políticos, es:

 “lo más de lo más”.

 

Pero será para ellos, pues tenemos unos Gobiernos, que en aquella época se les habría aplicado la Ley de Vagos y Maleantes. Impera el odio, la envidia y el revanchismo.

 

Entre Pedro y Pablo han vuelto a dividir de nuevo a los españoles, están a punto de hacer desaparecer la clase media y la Monarquía. España está en ruinas y ya mismo nos meterán en la cárcel por decir que con Franco se vivía mejor.

 

Como ciudadanos, estamos viendo a gobiernos indignos, que se están aprovechando de la pasividad de muchos españoles, que solo saben quejarse pero que no mueven un dedo por España.

 

Este recuerdo de como ha sido nuestra historia reciente, podría servir para hacer una reflexión y marcarse unos objetivos como pueblo que nos devuelva a los buenos principios en los que no tenga cabida ni el odio, ni el rencor y en el que todos seamos tratados por igual de forma justa y respetuosa.

 

 

 

 

(maespin/jubilado/softmiki.blogspot.com)

 




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